Exploramos esta elegante mansión abandonada emplazada en lo alto de una montaña, en la que para nuestra grata sorpresa encontramos diversos objetos y pertenencias de sus antiguos habitantes que dejaron una vez la abandonaron, la mansión a su vez tenía anexada una casa que estaba destinada para los criados y sirvientes que mantenían la mansión y todas las tierras colindantes, la finca no se erigió en plena montaña por mera casualidad, sino que su propietario y fundador original sufría una grave afección respiratoria, con lo que la pureza y calidad de aire lo convertían en un lugar óptimo para afincarse, la mansión a su vez está provista de grandes establos, corrales y bodegas.