Galicia, la tierra desde donde salieron miles de emigrantes a Venezuela, ha recibido a más de 40.000 venezolanos en los últimos años. Al principio, llegaban los hijos y los nietos de los gallegos que vivieron en Venezuela pero cada vez llegan más venezolanos que no tienen ningún nexo familiar con esta región de España.

Las viviendas son mucho más económicas que en las grandes ciudades de España y en los pueblos se pueden conseguir casas en alquiler en 250 y 300 euros. Los venezolanos también elogian la calidad y el precio de la comida y la forma de vida más tranquila y relajada.

En este nuevo programa de Venezolanos por el mundo, recorrí las cuatro provincias gallegas (A Coruña, Lugo, Ourense y Pontevedra) para conocer cómo viven y cómo trabajan los venezolanos que han llegado a Galicia en los últimos años.

Comencé mi viaje en Lugo, donde conocí a Ricardo González, un empresario venezolano que fue socio de la conocida cadena de tiendas El Fortín, y que ahora compra pueblos abandonados en las orillas del río Miño para el turismo y la producción de vino.

Continué mi viaje por Vigo, ciudad donde conocí a tres amigos venezolanos que me presentaron una panadería de moda en Vigo (Caracas Bakery Vigo) y también me llevaron a conocer una casa rural en Mondariz, pueblo famoso por sus aguas termales y de alta calidad, y regentada por un matrimonio de venezolanos. En Vigo, hablé con María Fernanda Ruiz, presidenta de la asociación de jubilados venezolanos en Galicia, con quien disfruté de las vistas maravillosas de la ciudad de Vigo, la más poblada de Galicia.

También visité Moaña, frente a Vigo, donde conversé con Puri, una venezolana que fue vicepresidenta de un banco y que ahora ayuda a los venezolanos a presentar su CV para encontrar trabajo en Galicia.

De Vigo viajé hasta Ourense para entrevistar a Elsy y a otros venezolanos que trabajan en el Instituto da Familia, que da apoyo a los migrantes mayores y a los retornados. Y aproveché el viaje para entrevistar a mi propia tía, Lucía Abadín, que añora sus años de juventud en las playas de Venezuela. Y tengo que confesar que no pude contener las lágrimas al editar su participación en este video.

De allí me trasladé a Coruña, donde visité la torre de Hércules don Diego Alonso, un venezolano afincado desde hace muchos años en Galicia, y también conversé con Maricarmen González, que recuerda con mucha simpatía su infancia en Venezuela.

Allí descubrí un bar llamado El Tequeño, en plena plaza de María Pita, donde me explicaron que el tequeño ¡ya eses un plato típico de Coruña!

De allí viajé a Arzúa, un pueblo donde se fabrican uno de los mejores quesos de España y descubrí a la familia Rincón, padre e hijo fundadores de Galmara, una fábrica de quesos venezolanos hechos con leche de vacas felices de Galicia.

Y finalmente visité Santiago, donde caminé con el consejero de Emigración del gobierno gallego, Antonio Rodríguez Miranda, quien me explicó las ayudas otorgadas por el gobierno gallego a los retornados. Y allí acudí a la misa en la Catedral de Santiago, donde llegaron las reliquias de José Gregorio Hernández.

Espero que disfruten tanto como yo a este nuevo episodio de Venezolanos por el mundo: “Venezolanos en Galicia”.