En Estados Unidos, gigantes de la música han demandado legalmente a las empresas Suno y Udio acusándolas de usar la música de las disqueras para entrenar sus sistemas de inteligencia artificial generativa. De esta manera, reclaman los sellos musicales en su demanda, que se "competirá directamente y abaratará el trabajo de los artistas humanos, y en última instancia lo ahogará". Varias empresas en diversos sectores se han puesto en guardia frente al auge de la IA.