La finalidad de esta Invocación, es conectar con la energía del Arcángel Metatrón. Según la tradición, él fue en Vida el Patriarca Enoch y fue convertido en arcángel por Dios mismo, convirtiéndose así en un mediador entre la humanidad y la divinidad, representado algunas veces por una espiral que puede expandirse y contraerse, mostrando el ciclo de expansión y contracción de la creación a partir de un punto primordial. Estos atributos se refuerzan con el hecho de ser el regente de la esfera de Kether, primer punto de manifestación de la voluntad divina hacia la creación. Entre sus nombres están “El príncipe del rostro”, “Quién se sienta al lado del trono” y “El pequeño YHVH”, mostrando su poder en la Jerarquía Arcangélica. En la geometría sagrada existe una figura llamada el Cubo de Metatrón, que contiene todas las figuras geométricas relacionadas con el mundo manifiesto, dispuestas a manera de un plano energético que nos enseña simbólicamente el proceso creativo del universo. Los nombres usados al comienzo de la invocación pertenecen a la cruz Cabalista Atá (Tú eres), Malkuth (El Reino, Ve Geburah (El Poder), Ve Gedulah (La Gloria), Le Olam (Por siempre). Y luego el Nombre Eheie (Yo Soy), que pertenece a la esfera de Kether previamente mencionada. La imagen arcangélica es del libro “Un Árbol de Ángeles” de J. Nájera