Desde la década de 1950 hasta hoy, los automóviles eléctricos han pasado por una notable transformación. En los años 50 y 60, eran casi inexistentes en el mercado, eclipsados por los vehículos de combustión interna. La crisis del petróleo en los años 70 reavivó el interés, pero las limitaciones tecnológicas impedían su adopción masiva.

En los años 80, los avances fueron escasos, pero se sentaron las bases para el futuro. En los 90, las regulaciones ambientales como el mandato de vehículos de cero emisiones en California llevaron a la creación del GM EV1, que, aunque no tuvo éxito comercial, demostró el potencial de los EVs.

La década del 2000 marcó un cambio significativo con la fundación de Tesla Motors y el lanzamiento del Tesla Roadster en 2008, que mostró que los EVs podían ser atractivos y de alto rendimiento. Paralelamente, el Toyota Prius popularizó los vehículos ecológicos.

En la década del 2010, la popularidad de los EVs explotó. Tesla lideró con modelos como el Model S, Model X y Model 3, mientras que otros fabricantes como Nissan y Chevrolet lanzaron modelos exitosos como el Leaf y el Bolt. La infraestructura de carga mejoró, haciendo los EVs más prácticos.

En la década de 2020, la competencia se intensificó con nuevos actores y la transición de fabricantes tradicionales hacia la electrificación. Modelos como el Ford Mustang MachE y el Porsche Taycan ampliaron la oferta. Los avances en tecnología de baterías y carga rápida, junto con políticas gubernamentales favorables, aceleraron la adopción de los EVs.

los automóviles eléctricos han evolucionado de ser una curiosidad a convertirse en una parte crucial del esfuerzo global por un futuro más sostenible. Con avances tecnológicos continuos y creciente aceptación, los EVs están en camino de convertirse en la norma en el transporte moderno.