La RCP solo con las manos puede salvar vidas. La mayoría de las personas que sufren un paro cardíaco en casa, en el trabajo o en un lugar público mueren porque no reciben inmediatamente RCP por parte de alguien en la escena. Si ve que un adolescente o un adulto sufre un colapso súbito, llame al número de emergencias de su localidad, presione con fuerza y rapidez en el centro del pecho y utilice un desfibrilador externo automático, o DEA, siempre que haya uno disponible.
Para saber más, visite: https://www.international.heart.org.