El daño cerebral a causa de un ictus puede producir una importante pérdida sensorial del lado afecto, por lo que es importante que dediquemos tiempo para estimular este lado y evitar esta deprivación sensorial. Tras el descanso nocturno, el cuerpo deberá ir activándose poco a poco y tenemos que tener en cuenta que el hemicuerpo tardará más. Por este motivo, antes de levantarnos de la cama se pueden poner en práctica diferentes actividades de autoestimulación que nos ayudarán a conseguir este objetivo. En este vídeo se muestra una secuencia útil para lograr “despertar el hemicuerpo afecto” tras la hemiplejia. Esto contribuirá a que nuestro hemisferio cerebral lesionado también “despierte” y se activen las neuronas favoreciendo los procesos de reparación neuronal.